lunes, 11 de marzo de 2013

Capítulo 30: "Vos necia, Yo mentiroso"


Hola chicas mil perdones por la demora estoy con un temita importante para mi ya les contare luego pero estoy a full, les dejo nuevo capi esperando que les guste, un besote a todas, gracias por comentar siempre

PD: percha mi cel murio, se me rompio la bateria esta apagado por eso no vi tu mensaje, prontito me conecto te aviso a tu msn



CAPITULO 30:
Lali  y Vico….
—¿Crees que lo va a hacer de verdad?
—¿Vengarse?... De seguro... Aunque espero que sólo queme mi ropa, o algo así...
Rochi parece buena e inocente, pero a veces...
—¿Buena e inocente?... Parece una puta, que es otra cosa.
Lali observó a Vico sin ocultar su desagrado.
—¿Y a vos como te fue anoche?
—Como siempre... Tener que cubrir esos eventos de caridad es una verdadera
pesadilla.
—De seguro estaba lleno de bellas modelos.
—No soy como vos, Lali. Yo no necesito buscar en otros sitios aquello que tengo tan
cerca.
Y diciendo esto la acarició con furia contenida. La muchacha lo dejó hacer, con un gesto tibio. Era raro sentir el deseo de él, sus ansias. ¿Podría acostumbrarse a esa nueva forma de contacto físico, donde la ternura daba paso a la excitación?
Al darse cuenta que ella no lo rechazaba, Vico comenzó a acariciar también su cabello, y trepando por él, sus mejillas y sus labios. Con miedo de espantarla, lentamente desplazó su mano, y comenzó a acercar la cara de Lali hacia la suya. Y ya casi estaba por besarla, cuando ella se alejó.
—Todavía no estoy lista.
—Me pregunto si a Martinez se la haces tan difícil – comentó él, sin ocultar su
decepción.
—Voy a hacer de cuenta que no te he escuchado.
—De todas formas, la mayoría de las veces no lo haces.
—No sé si hacemos bien en seguir viéndonos...
—¿Acaso no son suficientes las horas que pasas con Martinez?
—¿Qué te ocurre, Victorio?
—¿Qué te ocurre a vos con él, Lali?... ¿Cuánto estuvimos aquí? ¿Dos horas? Hora y
media las perdiste en alabarlo.
—Porque es increíble como periodista.
—Agustin Sierra también, y prácticamente no lo mencionas.
Sí, era cierto. Agustin era un periodista de raza, y hasta Pablo lo admiraba. Lali enrojeció. ¿Qué le estaba ocurriendo con su jefe? ¿Por qué la había complacido tanto aquel comentario grosero acerca de su belleza?
Y bastó pensar aquello para que, irreflexivamente, Lali buscara la boca de Victorio y le diera un beso. Pudo ver los bellos ojos de su amigo, abiertos hasta lo inimaginable, por la sorpresa que le había producido aquel gesto impensado. Lali se alejó, mientras él la contemplaba, todavía mudo.
—¿Sentiste algo? –le preguntó la muchacha.
—¿Y vos?
—Todavía no estoy lista...
¿Acaso alguna vez iba a estarlo para él?
—Fue una mala idea –insistió ella, ante el silencio de su compañero—. Ya son las
siete. ¿Me acompañas a la Misa?
—Te llevo hasta la Iglesia si queres.
—¿No te vas a quedar?
—Todavía tengo que redactar la nota del sábado.
—¿No estas yendo más a Misa?
—¿Te has vuelto mi conciencia ahora? –le preguntó él en forma agresiva.
Y esta vez fue Lali la que abrió sorprendida sus oscuros ojos. Luego de transitar toda una vida juntos, Vico se estaba convirtiendo en un completo desconocido para ella. Esas pequeñas explosiones eran como el rumoreo de un volcán a punto de estallar. ¡Y ella que siempre había recorrido su alma como si se tratara de una plácida llanura!
—No te veo bien, Vic... Creo que la Capital no te sienta. Es evidente que tu trabajo
está muy por debajo de tu nivel, y...
—¿Me queres sacar del medio para quedarte con Pablito?
—Estás obsesionado con él.
—Vos lo estás... Y ni siquiera podes ocultarlo.
La muchacha se quedó pensativa.
—Vico... Sé que nuestro acuerdo incluía el tratarnos como extraños, pero... ¿puedo
ser sincera con vos? Porque me anda faltando un amigo.
—Te escucho.
—Yo también noto que últimamente estoy un poco obsesionada con mi jefe.
Estamos todo el día juntos, y tiene algunas cosas que me hacen recordar a Gas.
—Martinez  no se parece en nada a tu marido.
—¡Lo sé!... Pero no puedo evitar sentirme confundida cuando anda cerca... Estoy
preocupada, porque sé que Pablo es un mentiroso compulsivo, con un inmenso
poder de seducción. Desde que estoy ahí ya le he visto llevar a la cama, y olvidar, a
más de treinta mujeres distintas.
—Pero a pesar de que llevas la cuenta, igual te atrae. A él no le darías ese beso
avergonzado que acabas de darme a mí. ¡No! A él lo besarías con pasión.
—¡A él no lo besaría de ninguna manera! ¿Me crees tan estúpida como para elegir a
semejante mentiroso?
—Uno no elige el amor.
—¡Por favor, Vico! Estuve casada más de cinco años, ¿lo olvidas?... Ese amor
impetuoso del que hablas dura menos que un suspiro. ¡Claro que uno elige! No
podes elegir a quien amar, pero si la manera en que vas a hacerlo... Y si lo que
queres es construir algo serio, deben esforzarse los dos. Porque, por mucho amor
que haya, a la primer pelea te importa un cuerno el romance, y queres tirar a tu
pareja de lo alto de la montaña. Por eso para hablar de matrimonio se necesita más
que una simple atracción..., ¡por fuerte que sea!
—¿Tanto te gusta?
—¡No me gusta!... Ya te dije que es inaguantable... Pero cuando está cerca...
—¡Renuncia! Vuelve conmigo a Mendoza. Esta ciudad de mierda nos está
enloqueciendo. He hecho cosas aquí de las que nunca hubiera sido capaz... Por
favor... Volvete conmigo.
—No, Vico... No puedo. Siento que por fin estoy creciendo. Que tengo una vida
propia, y que puedo manejarla.
—Entonces renuncia a tu trabajo. Sabes que tengo dinero de sobra para
mantenerte.
—Yo no quiero...
—... sin que eso te obligue a elegirme.
—Es ridículo renunciar a una oportunidad como la que tengo con Pablo, por miedo...
Sé que puedo manejar la situación con él... Y, además, mi jefe siempre se comportó
de la mejor manera conmigo... Nunca...
—¿Nunca?
Lali agachó la cabeza, avergonzada. ¿Nunca?...

Al dia siguiente…
—Y de las mediciones del minuto a minuto, surge claramente que el encendido baja
en los segmentos en que está sólo Mery. Es lo que yo digo, Pablol... La gente
ya está harta de sus boberías de niña rica.
—Si fuera así, Paris Hilton se pudriría en la cárcel sin que nadie se hubiera enterado.
La riqueza y el poder atraen. Y, digas lo que digas, Benja, la muchacha todavía tiene
su encanto para nuestro público –defendió Maca  a su colega.
—Yo coincido con Benja... La verdad es que Mery está cada día más tonta –se
quejó Pablo—. La otra vez tuvo la exclusiva con la primera dama por cinco minutos.
Todos se morían por confirmar los rumores de divorcio, pero ella, no. Por el
contrario, los desperdició preguntándole por su modisto. ¡Me tiene harto! Pero no sé
con quien reemplazarla. No es fácil. Tendría que ser una mujer, hermosa, inteligente,
hablar al menos dos idiomas...
La vista de Pablo se desvió hacia Lali, que, ajena a la conversación, estaba sirviendo el café a unos pasos de distancia.
Pero Macarena se interpuso de inmediato.
—¡Ni lo pienses!
—¡Sería fabuloso! –se entusiasmó Benja.
—¿Cuántos idiomas hablas? –le preguntó Agustin a la muchacha, por encima de los demás.
—¿Yo? –se sorprendió Lali.
Y de inmediato contempló la cara de circunstancia de aquellos cuatro. ¡Estaba visto que no podía alejarse ni un minuto!
—Ninguno –mintió.
—Inglés, francés e italiano –respondió Pablo por ella.
La joven lo observó, sorprendida.
—Eso decías en tu solicitud de empleo.
—No quiere decir nada. Uno siempre miente en esas cosas –comentó Maca con nerviosismo.
—Berta nunca miente –replicó su jefe, mientras clavaba en su asistente esa mirada
que la ponía a temblar— ¿No es cierto? –le preguntó con malicia.
—¿Quieren que traduzca algo?
—Pensamos que serías buena para... –comenzó a explicar Benja, pero Pablo lo
interrumpió de inmediato.
—Nada. No pensamos nada. Queríamos saber, simplemente.
Maca observó a su jefe con una mezcla de satisfacción y agradecimiento. Lali, en cambio, volvió al escritorio y repartió los cafés que llevaba en la bandeja, sin averiguar más.
—Creo que con esto terminamos, ¿no? –preguntó Agus, a quien se le hacía tarde
para su partido de tenis.
—¿Puedo demorarlos unos segundos más? Cuatro pares de ojos se clavaron en
Lali, al oírla. Generalmente la joven tenía un papel secundario en aquellas
reuniones, escuchando a todos con respeto, y cuidándose de hablar, a menos que
fuera necesario.
—Vos dirás, Berta.
—El señor Martinez me dijo que el último jueves estuvieron haciendo algunos
comentarios en mi ausencia.
Ahora aquellos cuatro pares de ojos se miraron entre si, confundidos.
—Quiero dejar esto en claro, para no tener que hablar sobre el asunto nunca más...
No tengo intenciones de acostarme con ninguno de ustedes, por ningún motivo.
—Pero Lali... –intentó defenderse Benja.
—Y no lo digo porque esté en mi ciclo menstrual... Pablo y Agustin se miraron sin
entender, pero Benja agachó la cabeza, mientras Maca sonreía.
—Y por cierto, me molesta que me hables todo el tiempo de eso, Benja. Todo bien
con vos, y los demás. Son muy lindos, y otra en mi lugar estaría encantada con sus
atenciones. Pero como yo soy una especie de fanática religiosa, y estoy convencida
de que el diablo me va a torturar por toda la eternidad si tengo sexo sin casarme, no
voy a cambiar de idea... Así que, a menos que alguno de ustedes esté considerando
seriamente hacerme una propuesta matrimonial...
La muchacha miró a aquellos varones, uno a uno, fingiendo seriedad, y luego continuó.
—¿No?... Como lo pensé.
Pablo sonreía, encantado, mientras que los demás se miraban entre sí, confundidos.
—Ah, y en cuanto a vos, Maca... Somos las únicas mujeres en medio de tanto
testosterona. Si algo vuelve a molestarte, te pido que me lo digas en la cara. Acepto
tu amistad, o tu odio, en tanto lo hagas de frente... Bueno. No quiero demorarlos
más, y, si me disculpan, tengo mucho que hacer en la cocina. Buenas tardes.
Los tres caballeros perdieron su mirada en el movimiento leve de la cola firme de Lali , mientras la observaban retirarse, embelesados.
—Apuesto que, a pesar de que lo negó, está así porque le vino –fue la conclusión de Benja.
Y nadie lo refutó.

3 comentarios:

  1. K pesado k es Benja.Lali los puso a los cuatro y a Maca en su lugar y hablandoles d frente.Tranquila,ocupate d tus cosas.Tu no desapareces xk en cuanto puedes pones cap.Espero pronto k sean caps.

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  2. JAJAJAJAJAJAJA Me rio tanto! Benja un bobaso pero gracioso! El insoportable es Vico!!!! Espero leerte pronto! Beso!!!

    Sol

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  3. Vico se esta poniendo muy densooo!!!! y no me gusta como se esta comportando...!!!! coincido con Lali cuando le dijo q la Capital le sento definitivamente mal!!!!
    Y AMOOOOOOOOOOO EL CARACTER DE LALI..!!!! Le puso los puntos a todos... ES una genia!!!!! Y Pablo q se muere por ella tan el duro q se hace va a terminar siendo un perrito faldero...!!!! Xq como bien el dice Lali en una necia!!!!
    Y q decir de Benja.... es un tarado me hiso reir con la ultima frase...
    Me encanta AMO LA NOVE!!!!!
    Espero q subas pronto... Besos q estes bien!!!! :D

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